Que si en la nueva normalidad ya los centros comerciales no serán tan visitados...que si las personas prefieren comprar más por Internet que asistir a un centro comercial...Son los comentarios que a veces escuchamos en esta nueva era. Sin embargo, en nuestra observación , de escuchar atentamente la opinión de nuestros clientes y basados en la información obtenida de varios artículos, pensamos que los Centros Comerciales, más que centros de compras que ofrecen variedad de bienes, son puntos de encuentros, para pasear, relajarnos y hasta para estirar un rato las piernas, como le hemos oído afirmar a algunas personas mayores; porque en su nueva concepción, son espacios contenidos cómodos y seguros e identificados con las preferencias de consumo o hábitos de compra de los que lo visitan ¡muchas veces en extremo! Llegando a fidelizarnos con los comercios de estos centros, en el consumo diario de alguna marca o producto específico, tanto para el café de la mañana, del almuerzo al mediodía o de la merienda de la tarde…
¡Ni que decir de las épocas o días especiales! Los Centros Comerciales se toman muy en serio estas fechas. Y no es solo para estimular a los visitantes a que prefieran a su comunidad comercial para sus compras, sino también para crear un ambiente festivo para compartir con todo aquel que lo visita. En fechas especiales, como en diciembre, carnavales, Semana Santa, día de la madre, del padre, el abuelo o del niño, se dan a la tarea de organizar eventos: parrandas navideñas, actividades con San Nicolás, gaitas, bailes, conciertos... poniendo énfasis y entusiasmo en las decoraciones alusivas a cada fecha, que grandes y chicos disfrutamos por igual. Los Centros Comerciales no solo ofrecen variedad de productos y servicios, también conseguimos la posibilidad de degustar un delicioso helado, una crujiente galleta, o sentarnos a saborear una comida o un rico café, en el intermedio a nuestra compra, mientras disfrutamos de un ambiente confortable y quizás hasta de un pequeño espectáculo o exposición, todo en un solo lugar.
Aunque muchas veces pensamos que estos maravillosos espacios son un concepto nuevo, este modelo de comunidad comercial y social data de varios siglos. Los Centros Comerciales son el concepto evolucionado de los BAZARES PERSAS, los cuales, en ese entonces, agrupaban a innumerables comerciantes en espacios muy estrechos y preferiblemente techados, que ofrecían al visitante variedad de comercios con mercancías traídas de otras regiones o elaboradas en su propio país. Ya desde esa época se intuía, que un comerciante aislado no recibía grandes utilidades por la venta de sus bienes y que en la práctica se comprobaba, que los comerciantes locales debían entrar en competencia con un sinnúmero de foráneos y paisanos, para poder ver sus cuantiosas ganancias. Incluso se agrupaban por conceptos comerciales iguales o similares, para entrar en una sana comparación ¨de quién vendía más¨, tal cual lo hacen en este momento los centros comerciales temáticos, orientados a la moda, hogar, decoración y tecnología.
Lo interesante de estos Bazares, al igual que los Centros Comerciales de hoy en día, era su impacto social más allá de su razón de ser económico, ya que se convirtieron en los centros de reunión de los comunes de la zona, no solo para comprar sino para conversar de temas filosóficos, políticos, religiosos y poder disfrutar de las diversas manifestaciones culturales que poseían los habitantes del territorio, al mismo tiempo que bebían un aromático té o degustaban comidas aderezadas con especias locales o de países lejanos. Esto propiciaba aún más el comercio ¡había que socializar para poder lograr el tan deseado intercambio comercial! Esto no ha cambiado, solo ha evolucionado en la forma, pero el fondo sigue igual.
El modelo de mercado milenario que apareció hace 550 a C. aproximadamente, fue acogido por todo el mundo islam, difundiéndose por Europa y posteriormente traído a América. Pero a medida que la ciudad se urbanizo y el terreno se estrechó, el hombre entendió que eran aún más esenciales estos espacios, para realizar una importante relación socio-comercial; así que el concepto de los Centros Comerciales se desarrolló y maduró hasta llegar a sus actuales formas, pero ahora de manera estructurada y organizada. Ya en los años 60’ se realizaron grandes inversiones en proyectos y construcción de inmuebles comerciales, a la par que se invertía en estudios del comportamiento humano y su relación con estos espacios.
En la actualidad los Centros Comerciales se planifican y construyen, con sus respectivos análisis de hábitos de consumo y las necesidades reales de bienes y servicios para cada zona o región, adoptando una importante forma dentro del contexto urbanos según su función dentro de la ciudad o urbanización de su ubicación. Hoy, se tiene el pleno conocimiento que ya el objetivo no es solo atender los requerimientos de espacios para que los comerciantes ofrezcan sus productos y/o servicios, sino con la misión de invitar a un ambiente amigable, seguro y confortable. Los Centros Comerciales son para comprar, pero también para pasear, compartir con familiares y amigos, brindando una sinergia entre la compra y actividades para interactuar de una forma presencial, pero diferente de como lo hacemos en casa o en el trabajo y, sobre todo, para ver gente y dejarnos ver.
Soy Teresa Salas de Teresa Salas Soluciones Inmobiliarias y si le gusto nuestro articulo déjanos un motivador like👍 , comenta y comparte.
Hasta la próxima!